Cuando un arrendador renta una propiedad, debe seguir ciertas normas y obligaciones. La garantía de habitabilidad de California exige que todos los arrendadores se aseguren que sus viviendas sean habitables y seguras para los inquilinos, tanto al momento de entregarlas, como durante todo el tiempo que dure el contrato.
Al mismo tiempo, los inquilinos tienen la obligación de cuidar de la propiedad, y de notificar al arrendador sobre cualquier desperfecto y situación que puedan hacer que la vivienda en cuestión no cumpla con los requisitos de seguridad y deje de ser habitable.
Lamentablemente, hay arrendadores a los que les gusta mucho la idea de recibir dinero por sus propiedades, más no el cumplir con sus obligaciones. Por esta razón, resulta importante que los inquilinos se encuentren informados sobre lo que puede hacer que una vivienda no cumpla con la garantía de habitabilidad.
Estas situaciones incluyen:
- Fallas y problemas estructurales
- Problemas de moho y humedad
- Mal funcionamiento de plomería
- Mal funcionamiento de los sistemas eléctricos
- Roedores, chinches, cucarachas, y otras plagas
- Falta de calefacción y/o aire acondicionado
- Baños y cocinas insalubres, entre otros.
Si eres una persona que se encuentra rentando una vivienda y tienes alguno de estos problemas, he aquí algunos pasos que puedes seguir:
- Notifica lo más pronto que sea posible a tu arrendador de la situación. Una vez enterado, tu arrendador deberá realizar las reparaciones necesarias dentro de un periodo razonable de tiempo (entre 1 y 2 semanas), a menos que el daño sea tan grave que requiera de un periodo más largo, en cuyo caso, es responsabilidad del arrendador hacértelo saber.
- Si tu arrendador se niega a hacer las reparaciones necesarias, puedes tener derecho a retener la renta para que seas tú quien las realice.
- De la misma forma, podrías tener derecho a rescindir el contrato y a desocupar la vivienda sin previo aviso. La ley de California permite estas situaciones cuando la seguridad de los inquilinos y sus familias está en riesgo.
Siempre es importante contactar a un abogado que te pueda asesorar en caso de que no estés seguro sobre qué hacer, o decidas llevar a cabo alguna acción legal. Los abogados de Friedman & Chapman contamos con amplia experiencia en este tipo de casos y podemos ayudarte. ¡Llámanos hoy mismo!